¡Este proyecto ha sido todo un reto!
Nos presentamos ante una habitación que contaba con un gran desafío: la irregularidad de sus paredes. Ninguna de ellas era perpendicular ni paralela al resto.
Pero, que no cunda el pánico. En Mugarri no hay estancia que se nos resista.
Desde un primer momento quisimos conocer cuáles era las necesidades exactas de los propietarios del dormitorio.
Sabíamos que no se iba a tratar de un proyecto sencillo, pero debíamos conocer todos sus deseos para comenzar a trabajar.
Sus peticiones fueron muy concretas:
- Conseguir amplios armarios para poder disponer de espacio de almacenaje.
- Contar con un escritorio/tocador propio.
- Y, estéticamente hablando, le enamoraban los colores y tonos neutros.
Anotamos cada una sus palabras, y comenzamos a dar una nueva vida a este espacio.
Antes
Después
Era primordial integrar nuevo mobiliario en la estancia para satisfacer las necesidades de la clienta, y al mismo tiempo, queríamos dar vida a un dormitorio acogedor, calmado, y que evitase cualquier sensación de agobio.
Tras un profundo estudio del espacio, dimos con la solución.
LA CAMA
Decidimos reubicar la cama, pero optamos por colocarla cambiándola de pared. De este modo, la sensación visual nada más entrar al dormitorio resulta mucho más amena y liviana. ¿No te parece?
Continuamos diseñando un nuevo cabecero a medida. Optamos por el color blanco y el encanto innegable de la madera, dos tonalidades definirían la esencia de la estancia.
Y, tras esta pieza, escogimos un papel de pared de esos que enamoran a primera vista. Lo firma Little Greene, y combinando colores claros y motivos florales, envuelve la zona de descanso con una sensación de naturaleza sin igual.
Para conseguir el mejor de los resultados, redistribuimos los puntos de luz existentes y los adaptamos a la nueva distribución del dormitorio.
Interruptores y tomas de electricidad a ambos lados de la cama, y nuevas lámparas para disfrutar de los ratos de lectura nocturna lo más cómodamente posible.
¡También a ambos lados de la cama!
EL ESCRITORIO
Frente a la zona de descanso, encontramos la pared donde ubicamos el escritorio.
Integrado por completo en la estética de la estancia, diseñamos un mueble que unifica las cualidades de una cómoda con cajones y un escritorio, sirviéndonos al mismo tiempo a modo de tocador.
Y como no podría ser de otra forma, los tonos neutros y colores blancos, arenas, y rosas quedan patentes también en este rincón.
A su lado, un amplio espejo que distribuye la luz natural por todos los rincones, y una televisión suspendida para poder disfrutar de nuestras series favoritas desde la cama.
¡La funcionalidad explotada al máximo!
EL ARMARIO
Giramos la vista hacia la derecha y damos con un elemento que nos tiene enamoradas: el amplio armario vestidor.
Diseñado totalmente a medida, satisface una de las necesidades principales de su propietaria: disponer de amplio espacio de almacenaje para su ropa y complementos.
Como en cada uno de nuestros proyectos, cada elemento ha sido seleccionado minuciosamente y cumple con un propósito claro, desde la estética exterior hasta la distribución interior.
Por fuera, defiende un aspecto limpio y discreto, sin tiradores.
De esta forma, logramos que un elemento tan grande como un armario de seis puertas pase lo más desapercibido posible en la estancia.
No recarga el ambiente ni evoca sensación de agobio. ¡Un gesto totalmente necesario!
En su interior, el armario dispone de todo lo esencial para almacenar ropa, accesorios, y todos esos elementos que no queremos dejar a la vista.
¡Y cada milímetro se ha aprovechado al máximo!
Es hora de confesar… ¿Quién no ha soñado alguna vez con un vestidor así?
Como podrás observar bajo estas líneas, el cambio que ha recibido esta estancia es fantástico. ¡Parece otra habitación!
Y, lo más importante, ha servido para lograr nuestro objetivo: dar vida a un dormitorio tan práctico y acogedor, que nos haga olvidar su complicada estructura.
Porque, aunque en ocasiones existan espacios que supongan un gran desafío, con trabajo duro y mucho mimo por los detalles… ¡En Mugarri los sueños se cumplen!
