Este proyecto es un trabajo muy especial para nosotras. Todo empezó hace años cuando nuestros amigos vinieron por primera vez a Mugarri. Necesitaban realizar la reforma de su cocina y pensaron en nosotras como las artífices para darle un giro radical a dicha estancia.
El resultado fue tan genial que al cabo de dos años volvieron. Esta vez necesitaban cambiar su salón. Tenían comprado el mobiliario de antes de conocernos y querían mantenerlo salvo el sofá, ya que él era la causa por la que querían un cambio.
Pasó el tiempo y un poco antes de las Navidades, aparecieron de nuevo por el estudio, esta vez algo más acompañados… ¡estaban embarazados!
Necesitaban montar la habitación del pequeño y de paso aprovecharían para cambiar los baños de la casa, montar la otra habitación que quedaba, y dar un cambio al hall, pasillo y habitación principal. Vamos, todo el resto de la casa que no habíamos hecho con anterioridad.
Cuando hicimos la cocina, nuestro mayor reto fue la búsqueda de espacios de almacenaje, ya que el espacio no era demasiado grande y necesitaban sitio en donde guardar las cosas. Por esa razón diseñamos un mueble de mediana altura en la zona de la mesa y donde colocamos el microondas, junto con un despensero de poco fondo para no invadir el espacio, en la zona de entrada.
A la hora de crear la gama cromática, ellos nos habían puesto la premisa de usar colores neutros, nada de colores llamativos, les encantaba el gris, el negro y el blanco, y querían mantenerlo. Así que les realizamos la cocina en blanco combinada con una bonita encimera en granito africano negro, con el suelo en un gris antracita y un papel en la misma gama para la zona de la mesa.
Cuando llego el momento del salón les presentamos tal cambio que al principio estaban supersorprendidos, pero luego fueron asimilando el cambio. Ellos querían un sofá con chaiselonge, mantener el mobiliario de la Tv y la mesa de comedor. Por esa razón simplemente les reorganizamos el espacio. Aprovechamos todos sus muebles, cuadros, etc., y elegimos un precioso sofá con chaiselonge. Acompañando a esa nueva reestructuración empapelamos la totalidad de las paredes con una papel precioso, manteniendo, eso sí, la gama cromática del negro, gris y blanco que tanto les gusta a ellos. El resultado no podía salir mejor. Tenían justo lo que deseaban.
Y por fin llegó les llegó su momento a los baños y las habitaciones. Pero era sin duda la habitación del bebé la que más ilusión nos hacía ¡Dejaban en nuestras manos la habitación de su primer bebé! Eso era una responsabilidad pero sin duda un gran orgullo para el equipo Mugarri.
Como punto de partida teníamos que aprovechar al máximo el espacio. La habitación no era muy grande y debíamos de diseñar una zona de armario ropero, otra de escritorio y la zona de dormir con una cama nido. Todo ello consiguiendo una sensación de amplitud y luminosidad.
Revestimos todas las paredes con papel pintado cuyo motivo era un sencillo dibujo de triángulos en diferentes tonos basados en gama cromática de la habitación: el blanco, el nácar, el verde musgo y el marrón. Para el mobiliario hemos optado por usar el blanco como color principal y dar unos pequeños toques con madera de roble y en laca color nácar. En la parte de descanso ya que no teníamos un gran espacio optamos por colocar una cama compacta con cajones para su mayor aprovechamiento. Con un cabezal y lateral en textil antracita. Ya que esta zona quedaba un poco escasa pusimos un bonito chifonier siguiendo los mismos tonos de la habitación.
Aunque el bebé todavía no necesita un escritorio, nuestra clienta estaba pensando ya en un futuro. Así que le colocamos en frente de la zona de dormir un amplio escritorio apoyado en dos patitas en un lado, y en el otro en vez de colocar la típica mesita con cajones optamos por un módulo cuadrado hueco y otro con dimensiones menores con una puerta. En la zona de arriba nos encontramos con una composición combinando módulos de puertas unidas entre sí mediante unas baldas.
Para la zona de vestidor contactamos con nuestro carpintero para crear unos armarios a medida con puertas abatibles en laca blanca igualando el tono del resto del mobiliario. En su interior lo distribuimos a gusto y necesidad de los clientes, colocando colgadores, baldas y cajones, siempre teniendo en cuenta que la ropa de su futuro morador iba a ser cortita.
Para la iluminación general colocamos un plafón el cual puede graduarse la intensidad de la luz a través de un mando a distancia. Para acompañarlo hemos colocado un aplique encima de la cama y otro de la misma casa en la zona superior del escritorio.
No os perdáis el antes y el después que os hemos puesto al final de este proyecto, merece la pena
En la habitación tercera se nos planteaba otro reto, era una habitación muy larga y estrecha. Nuestros clientes querían utilizar esta habitación como de invitados y a la vez que pudiese servir de “especie de vestidor” como apoyo al almacenaje del resto de los armarios de la casa. Todo ello sin perder la esencia de habitación. Es por ello que les creamos una primera zona de armarios, con puertas abatibles adaptadas a la altura y anchura de la que disponíamos. Optamos por realizarlo con uno de los últimos acabados en blanco que nos había traído uno de nuestros proveedores de confianza a nuestro estudio, en el cual la beta queda marcada en la textura del propio tablero. Para su construcción llamamos a nuestro carpintero para asegurarnos su perfecta ejecución. Como detalle hemos utilizado el mismo modelo de tirador que los utilizados en la cama.
Los colores que hemos usado para las paredes es el blanco, salvo en la cama en donde hemos colocado un papel con textura en color antracita ya que tenemos que recordar que ese color forma parte de la gama cromática de toda la vivienda.
Hemos colocado una cama compacta con cajones y una segunda cama. Toda la estructura está realizada en color topo con los tiradores en blanco. En cuanto a la iluminación utilizamos un plafón con luz regulable mediante un mando a distancia.
Para la zona de hall y pasillo hemos decidido empapelar las paredes con un papel pintado texturizado en color gris perla, combinándolo estratégicamente en la zona del hall de entrada con un papel decorado que hace resaltar el armarito suspendido de la entrada.
Nada más entrar en la vivienda nos encontramos con un gran armario con puertas plegables en laca blanca, con apertura mediante uñeros realizados en el propio material del mueble. Su interior está dividido en dos zonas, una de almacenaje- zapatero y otra principalmente para colgador. Como siempre intentamos crear los interiores adaptándonos a las necesidades del cliente.
Hemos completado la estancia colocando un taburete, para facilitar el cambio de los zapatos, acompañado de una iluminación especial a base de tres lámparas colgantes superdecorativas. A la izquierda colocamos un mueble en suspensión con hueco y puerta con colores a juego del papel decorado. Y completando la estancia una bonita lámpara de mesita.
El pasillo está iluminado a base de focos empotrados colocados estratégicamente para crear una atmósfera ideal, mientras que en la zona del fondo del pasillo nos encontraremos con un precioso aplique de forma redondeada.
Para la reforma del baño principal de la vivienda nuestros clientes querían algo moderno y especial pero que a su vez tuviese suficiente sitio de almacenaje. Con estas ideas nos pusimos manos a la obra.Optamos por una gama cromática en blanco roto y gris perla para dar luminosidad y amplitud al baño, y por supuesto porque es la gama de toda la vivienda. Tanto en el revestimiento de las paredes como en el suelo, colocamos unos bonitos azulejos imitación a mármol, tan de moda ahora mismo.
Para el mobiliario elegimos un conjunto compuesto por:
1- Una encimera de cuarzo suspendida. Con el toallero integrado y el lavabo desplazado para así salirnos del diseño habitual.
2- Un gran armario lacado en blanco roto con uñeros, distribuido en diferentes partes. La zona superior una gran puerta y en su interior todo baldas para un mayor almacenaje. En la zona central unos huecos en roble para hacer una separación visual a la altura de la encimera. La zona baja del mueble está distribuido por ocho cajones a diferentes alturas. Este armario está fabricado a medida por nuestro carpintero.
El conjunto de grifería de la ducha y del lavabo fue elegida en acabado cromo.
Para la iluminar el espacio hemos creado dos tipos de escenas. Por un lado una iluminación general a través de focos empotrados y por otro lado hemos colocado unas bonitas lámparas colgantes. Dichas lámparas son en cristal, con lo que conseguimos mantener la idea de amplitud y no recargamos el espacio.
Y por último el baño pequeño de la casa. Normalmente los aseos suelen ser espacios muy reducidos y hay que saber decorarlos con la mayor precisión posible. En el proyecto que os presentamos teníamos que renovar un aseo que dado su tamaño optamos por utilizar colores muy claros tales como el blanco y el gris perla.
Para el revestimiento de las paredes utilizamos porcelánico de gran tamaño con un dibujo muy sencillo y elegante. Hay que tener en cuenta que con el uso de piezas de gran tamaño logramos evitar mayor número de juntas y de esta manera la limpieza se vuelve más sencilla.
Como mueble de baño colocamos un mueble suspendido en laca blanco brillo con un solo cajón, el cual se abre mediante un pequeño uñero. El lavabo elegido es de sobre-encimera con forma redondeada realizado en porcelana blanca. Dado que ya habíamos elegido una forma redonda para el lavabo, diseñamos un espejo con la misma forma, es decir redondo. De esta manera el conjunto consigue ese toque diferente que estábamos buscando.
Las medidas nos dieron la posibilidad de colocar un plato de ducha cuadrado en color blanco con una mampara de puertas correderas con apenas perfilería, para conseguir una mejor limpieza.
El resultado de esta reforma es un bonito hogar, con sintonía, coherencia y armonía. Sus colores empastan en su totalidad y crean una atmósfera agradable y hogareña, que al final es lo que todos buscamos en un hogar.
